Una de las cosas más maravillosas de mi trabajo (¿es un
trabajo? Tengo dudas J)
es que me encuentro con personas excepcionales (las mezquinas las tiendo a
olvidar). Hoy me llegó directamente desde Londres una taza (porque las
colecciono y me encantan) que me regalaron, primero clientes ahora amigos, los
fundadores de Aloha24, una empresa que va a revolucionar la tecnología y la
logística del servicio a domicilio.
Cuando la recibí me dio un gran subidón, y me llegó al alma lo del “show me the money”. ¡Madre mía! ¿cuántas veces lo diré que hasta los amigos me envían una taza donde lo trae escrito JJ?
El show me the money
viene de la película Jerry Maguire, y es que de nada sirven las palabrerías,
las expectativas, las creencias, los powerpoints o levantar dinero si no
descubrimos dónde está el modelo de negocio, en definitiva, dónde está la pasta... Junto con José Antonio de Miguel,
escribí un post en Sintetia que hablaba de esta idea: “para emprender, no todo vale”.
Recuerdo aquí el manifiesto que no puede faltar en la caja
de herramientas de todo emprender:
.. No hay hechos dentro de tu oficina, lo
realmente importante ocurre fuera, donde viven, trabajan y sienten tus
clientes;
.. El fracaso es una parte inherente a la búsqueda de tu
Modelo de Negocio.
.. Si tienes miedo a fracasar, fracasarás.
.. Ningún Plan de Negocio sobrevive al primer contacto con los clientes.
.. No hay dos startups iguales.
.. Aprende a convivir con el caos y la incertidumbre.
.. Comunica, comparte y analiza tu aprendizaje.
.. Una startup no es una empresa en pequeño.
.. No construyas nada si antes no lo entiende el cliente ni tu entorno.
.. Nadie te va a dar ni un euro -porque no te lo “da” sino que espera su devolución con intereses – si no tienes un Modelo de Negocio que funcione.
Al final, lo que va a determinar el éxito o fracaso de todo
negocio es la capacidad de crear clientes, fidelizarlos, aportarles valor
añadido y que estén dispuestos pagar un
precio por ese valor añadido que te reporte beneficios. Beneficios
imprescindibles para seguir creando valor, para reinvertir y seguir trabajando
duro durante una larga distancia. Así que “Keep Calm and Show me the Money”
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